Ella está en el horizonte. Camino dos pasos y ella se aleja. Nunca deja que la alcance. ¿Para qué sirve, entonces, la utopía?...para caminar.

martes, 30 de octubre de 2007

Magia


Sueño mirando al cielo. Todo tiene más sentido ahora. La vida sonríe y yo le devuelvo la sonrisa. Aunque sea difícil, hay que caminar; aunque dé un poco de miedo, hay que plantar cara a los retos; aunque no se quiera hay que crecer, ahora, eso sí, por mucho que crezca, seguiré creyendo en la magia...

sábado, 27 de octubre de 2007

Afortunada


Necesitaba compartir dos cositas.
Una, el fatídico día de ayer. No sé con qué pie me levanté, pero sí sé que me caí, de bruces, más exactamente, y en el baño concretamente. Tuve un momento de inconsciencia en el suelo de losas naranjas, donde perdí el conocimiento y, de paso, un diente. Luego, corriendo al hospital para topar con unos personajillos que te ayudan haciéndote esperar muchísimo y sin una pizca de humanidad...quizá exagero pero tras seis horas de larga espera con un dolor inmenso, no me quedan muchos piropos para el sistema de sanidad, aunque, al menos, lo tenemos. Lo positivo, no tengo nada. (Aparte de una sonrisa digna del "po zi", que un buen dentista arreglará sin problemas.)
Pero, la mejor parte de todo, es descubrir que la gente te quiere. Y te quiere de corazón. Y eso es maravilloso, lo más bonito que te puede pasar en la vida, sin duda. El mejor remedio para cualquier enfermedad, que te quieran.
No tengo palabras para todos los que ayer me acompañaron, me dieron consuelo, me abrazaron, me quitaron las tontas preocupaciones de la cabeza, para los que me trajeron bombones, me hicieron reír, me dieron besitos, me dijeron que vendría el ratoncito Pérez, me aseguraron que buscarían el dinero hasta debajo de las piedras, llamaron a quince clínicas en busca de un dentista y soportaron todas las horas conmigo.
Me emociono de pensarlo, desde luego, no sé lo que tengo. Soy muy afortunada...eso sí lo sé.

domingo, 21 de octubre de 2007

Estar donde quieres estar



La felicidad es la certeza de no sentirse perdido.

Jorge Bucay

miércoles, 17 de octubre de 2007

Lo que hay que leer...


Hoy, como hago a menudo, leo las versiones digitales de los periódicos y, varias noticias llaman mi atención.
Por ejemplo:

Una que me horroriza

Titular: El genetista James Watson afirma que los blancos son más inteligentes que los negros
http://www.elpais.com/articulo/sociedad/genetista/James/Watson/afirma/blancos/inteligentes/negros/elpepusoc/20071017elpepusoc_1/Tes
Lo más terrible de esta noticia es que el científicio en cuestión ha sido premio Nobel. Creo, sin duda, que este hombre es además de racista, homófobo: " En su día llegó a decir que una mujer debería tener derecho a abortar si los análisis preparto mostraban que su hijo iba a ser homosexual, informa The Independent."y, poco conocedor de la Historia.
Me quedo con lo que dice el artículo 2 de la Declaración sobre la raza y los prejuicios raciales en el punto 1:"Toda teoría que invoque una superioridad o inferioridad intrínseca de grupos raciales o étnicos que dé a unos el derecho de dominar o eliminar a los demás, presuntos inferiores, o que haga juicios de valor basados en una diferencia racial, carece de fundamento científico y es contraria a los principios morales y éticos de la humanidad".
Qué triste.

Una que me alarma y me entristece

Titular: El virus del sida deja a una generación de alumnos sin profesores
http://www.elmundo.es/elmundosalud/2007/10/15/hepatitissida/1192466414.html

"El Ministerio de Educación de Mozambique estima que alrededor de 19.200 profesores morirán en esta década por culpa del sida o enfermedades relacionadas. Las áreas rurales son las más afectadas por esta situación, ya que sólo existe un educador por cada 100 alumnos, cuando las recomendaciones del gobierno apuestan por un 'profe' para 35 niños."

No sólo la muerte de estas personas, sino que los niños cada vez tengan menos maestros. No sólo porque el SIDA se expande y parece que todo esfuerzo es inútil, porque medio planeta mira para otro lado con estas noticias y todos seguimos tan felices quejándonos por "lo nuestro".

Una para pensar

Titular: Italia abre la vía para 'desconectar' a una mujer que lleva 15 años en coma

http://www.elpais.com/articulo/sociedad/Italia/abre/via/desconectar/mujer/lleva/anos/coma/elpepusoc/20071017elpepisoc_3/Tes

"Eluana lleva en coma 15 años. Desde que en 1992, cuando sólo tenía 19, un gravísimo accidente de coche la dejó en coma irreversible, fue internada en el hospital de la ciudad de Lecco, al norte de Milán. Desde entonces vive como un vegetal, en una cama y es, como dice su padre, sólo un cuerpo en las manos de quienes la asisten."

¿Hasta dónde llega la libertad? Yo no me afirmo ni a favor ni en contra de la eutanasia, pero en este caso, me parece injusto prolongar el sufrimiento de esta familia. Esta chica no va a volver a vivir y, ¿por qué tienen que obligarla a estar conectada a un aparato que la mantiene paradójicamente viva? ¿Hasta qué punto somos libres?, ¿hasta dónde puede llegar la ley?

Una para quedarse sin palabras

Titular: Un hombre mata a su mujer y al tío de ésta a tiros en un tribunal de Italia
http://www.elmundo.es/elmundo/2007/10/17/internacional/1192614424.html?a=4c4c22f74703059ab707280ccbf4f467&t=1192629584

"Un hombre ha matado a tiros a su mujer y al tío de ésta en la sala del tribunal de justicia de la provincia italiana donde se iba a celebrar una vista por su separación. El agresor fue abatido por policía cuando intentaba fugarse."
Más injusticias en el lugar donde se tienen que juzgar. ¿Qué hacían esos policías? ¿Tan descontrolada fue la locura de este hombre? Definitivamente, lo peor, la muerte de una mujer más y otra persona inocente, por culpa de esta violencia tan amarga y cruel.
Una de las polémicas

Titular: "No me llamo José Luis", insiste Carod-Rovira en TVE
http://www.lavanguardia.es/lv24h/20071016/53402655299.html

"El presidente de ERC y vicepresidente catalán, Josep Lluís Carod-Rovira, ha recriminado a dos ciudadanos invitados a un programa de TVE que le llamen "José Luis" y ha puesto de ejemplo el "menosprecio" de muchos españoles a la lengua catalana como una de las causas por la cual crece el independentismo.En su intervención en el programa de TVE 'Tengo una pregunta para usted', Carod ha criticado a dos ciudadanos de Valladolid por llamarle "José Luis" y no "Josep Lluís", y se ha dirigido a uno de ellos para espetarle: "Yo me llamo así aquí y en la China, y usted no tiene derecho a modificar mi nombre".Ante la insistencia por parte de una segunda invitada al programa en llamarle "José Luis", Carod ha dicho que "este menosprecio hacia la lengua catalana" realizado en "una cadena pública de televisión que también pagamos los catalanes" es uno de los motivos que lleva a que en Cataluña "crezca la desafección hacia España", un "proyecto cerrado" que "como posibilidad de vida en común ha fracasado", ha apuntado."
Si te llamas Mary y te llaman María, ¿te molesta? ¿No se pueden decir las cosas de buenas maneras, educadamente, sin crear conflictos? ¿Por qué tenemos tanto miedo a la libertad? ¿Si queremos respeto, no debemos respetar nosotros también?
Bueno...creo que voy a dejar al mundo por hoy y a ponerme a estudiar, definitivamente, más de uno debería leer más a menudo las noticias.

martes, 16 de octubre de 2007

Sorpresas nocturnas


Un rato antes, dándoles la vueltecita nocturna a mis perros, he contemplado una escena singular. Al lado de casa han abierto dos restaurantes uno a cada lado del portal. Mientras que La casa Roja triunfa, los Hermanos Paez tienen libres las mesas que esperan sin ser ocupadas. Y, noche tras noche, mientras paso por delante, he ido observando que siempre, a pesar de que no hay clientes, hay una fila de coches en doble fila. Hoy desvelé el misterio por fin. Y es, algo curioso y a la vez muy tierno. Congregados alrededor de una de las mesas, cuatro Paez juegan al parchís, arropados por la fresquita brisa malagueña. La familia se reune para comer el marisco que no se degustará y, de postre, partida de parchís. El patriarca más mayor lo observa todo, bastón en mano e interés despierto. Se escucha la tensión, el dado golpeándose en el reducido cubilete y la espectación ante el grito de: "¡Te como y me cuento veinte!".
Mientras caminaba, me han venido a la mente recuerdos de hace años, cuando mi abuela y yo pasábamos las tardes jugando al parchís. Ella siempre me ganaba, incluso cuando comenzó a perder la vista y tuvo que comprarse un dado enorme para poder ver los puntitos y que yo no le hiciera trampa. Ni con esas acertaba yo a ganar. El parchís no faltaba en el piso. La tradición, sin embargo, se ha ido perdiendo. No sé dónde está ese parchís con su funda de cristal donde pasamos tan buenos momentos.
Me he puesto un poco nostálgica, pensando en todo esto porque por desgracia, ella ya no puede disfrutar conmigo de apasionantes partidas. Sin embargo, esa familia me ha arrancado una sonrisa, pensaba que el juego estaba quedándose desfasado y que las tecnologías iban a acabar por desterrarlo del panorama de mesa. Gracias a que todavía existen personas así que, en vez de enchufarse a ver la televisión agrupados como autómatas, se divierten "comiéndose" los unos a los otros, disfrutando con risas mientras que el tiempo, la noche y el sueño den tregua.

sábado, 13 de octubre de 2007

De frente

Observo la sucesión de tempestades. En mis ojos se refleja el caos y, sin embargo, desde fuera, todo parece esperar. He aprendido a no dejar que el miedo me nuble. Quizá se ha adentrado en mí la extraña sensación de que el tiempo pone las cosas en su lugar y que todo tiene un enrevesado, complejo e inexplicable porqué. Mis piernas se balancean suspendidas en el vacío, siento algo de vértigo pero aún lo controlo. Está decidido, no voy a dejar que nada me arrastre. Duele un poco, pero más duele engañarse.

miércoles, 10 de octubre de 2007

martes, 2 de octubre de 2007

Me gusta bloguear



Otra noche más, me tomo la cena delante del ordenador. He hecho todo lo que debía hacer y ahora, por fin, tengo tiempo para mí. Es mi hora preferida, cuando puedo hacer lo que me apetezca, ya sea tumbarme panza arriba, zapping o correr dando vueltas por el barrio. Sin embargo, normalmente, mi pasatiempo favorito para esta hora señalada es bloguear. Sí, así es. Desde que me enganché a la moda blog (hace prontito un año), no he dejado de sorprenderme en este mundillo cibernético. No sólo por el hecho de crear mi pequeño espacio, del que me siento muy orgullosa, donde muchas veces me desahogo, o comparto alguna maravillosa canción, o un poema especial con quien quiera compartirlo conmigo; sino también por la posibilidad de conocer a través de enlaces y enlaces, blogs que me han cautivado y, sobre todo, personas enigmáticas que me alegro muchísimo de haber encontrado, a pesar de lo lejos que puedan estar de mi simple escritorio. Sin duda, Internet es un invento revolucionario que yo adoro y, los blogs, un universo paralelo donde puedes toparte con lo más inesperado. Guardo momentos y posts preciosos en mi memoria, comentarios que me llegaron al alma, que me arrancaron sonrisas en malos tiempos. Quiero hablar de mí, filosofar un poco me atrevo, contar mis penas, alegrías y miserias... desde chiquita he anhelado esto, escribir, compartir, hacer disfrutar y recibir a cambio un gran tesoro, la comunicación, la amistad.

No sé por qué, no es que sea un día especial (bueno, un poco...¡he aprobado el teórico de conducir! :P), pero me apetecía mucho dedicar unas líneas a este medio que tanto me aporta y que se ha hecho casi imprescindible en mi día a día.

Un gracias muy sincero a tod@s aquell@s que me han visitado y hecho muy feliz, a la vez. Y...si me estás leyendo y no tienes un blog aún...¿a qué estás esperando? ¡Anímate y bloguea!




lunes, 1 de octubre de 2007

Viento de otoño


Estrenamos octubre y semana a la vez. Al fin me veo libre de la tensión de ser futura conductora y me veo un poco más atada por la rutina estudiantil. A pesar de los problemas que parecen acompañarnos al otoño y a mí, el color ha empezado a cambiar y me siento alegre. Puede que se desvanezca en este viento lleno de hojas marrones y amarillas, mi positivad y entrega ante los cambios, pero eso espero que sea en un día mucho más lejano (y frío). Ahora sólo quiero que terminen las obligaciones y pueda comenzar la poesía.